Inteligencia Artificial

La Inteligencia Artificial (IA) está encontrando su hueco en diferentes espacios de la sociedad y las empresas. Los departamentos de finanzas o marketing ya trabajan de la mano de esta tecnología, pero, ¿Qué lugar puede tener en los RR.HH? Las posibilidades de mejora de la operativa de los departamentos de personas son infinitas.

Como todos sabemos, la tecnología para recursos humanos se basa, en muchas empresas, en un tedioso e interminable Excel que supone, a parte de una carga de trabajo enorme, una brecha en la seguridad de los datos y una gran cantidad de información inconexa.

Si no conectamos los datos entre sí, no podremos llevar unas políticas de RR.HH. que aporten un verdadero valor añadido a empleados y candidatos. Por ello, desarrollar nuestros programas de atracción, gestión y desarrollo del talento en torno a la tecnología es crucial.

Usando la Inteligencia Artificial para llegar a todos

Uno de los retos más importantes y complicados de los departamentos de personas es el de llegar a todos y cada uno de los empleados y ofrecerles lo que necesitan en cada momento. Si es cierto que en empresas de 50 o 100 empleados es más o menos factible, ya que todo el mundo se conoce y se puede asumir mediante un profesional enfocado a ello.

El objetivo empieza a ser un problema en organizaciones más grandes y deslocalizadas, donde la Inteligencia Artificial es capaz de identificar estas necesidades de los empleados, reportarlas a los responsables de RR.HH. y darles solución.

Esto no quiere decir que la IA vaya a sustituir a las personas, si no que va a ser un apoyo para el desarrollo de planes de gestión y del empleado, permitiendo ganar tiempo en acciones de mayor valor añadido en detrimento de otras acciones administrativas que no aportan un plus.

Aterrizando el concepto

A veces es complicado entender qué es la IA y qué puede hacer por las personas ya que es algo que no vemos ni podemos tocar. Aunque no lo creamos esta tecnología tiene más presencia de lo que pensamos en nuestro día a día: Cuando le pedimos a nuestro móvil que nos lleve por el camino más rápido a un sitio, cuando escribimos en Word y el corrector nos hace una sugerencia o al hacer un pedido por Amazon. Estos son sólo unos ejemplos cotidianos pero los RR.HH. también puede aplicarlo:

¿Dónde pongo mi oficina?

Pongamos el caso de una empresa que va a cambiar de oficina y quiere encontrar el mejor emplazamiento para sus empleados en base a la reducción de tiempos en los desplazamientos. Esta tecnología es capaz de recopilar el domicilio de todos los empleados, ponerlo en un mapa y estudiar las vías de comunicación, el transporte preferente y la situación del tráfico en su horario. Como resultado, la IA indica una o varias zonas donde mover las oficinas y que sea la más ventajosa para todos.

Esta acción, a priori, puede parecer que es más una decisión de la compañía desde un punto de vista global, pero verdaderamente es una decisión 100% enfocada a las personas. Para hacerlo sin tecnología habría que destinar muchos recursos humanos y tiempo si se desea tomar una buena decisión.

¿Cómo desarrollo a mis empleados?

Todo profesional tiene unos objetivos de plan de carrera que busca hacer crecer a las personas profesionalmente. Evidentemente, ocupar nuevos puestos requiere experiencia y habilidades, muchas de ellas nuevas, tanto en la organización como en el panorama laboral. Esto a los recursos humanos les supone un reto:

  • Conocer las habilidades pasadas, recientes y futuras que el mercado laboral desarrolla y/o demanda.
  • Identificar las necesidades de sus empleados en cada punto de su carrera.
  • Hacerles llegar las herramientas adecuadas para el desarrollo de estas habilidades en el momento idóneo y de la mejor forma posible.
  • Mejorar la experiencia del empleado.

Como se ha indicado anteriormente, en una empresa de 50-100 empleados es “asumible” por el conocimiento que se tiene de los empleados. En una empresa de 3.000 empleados y 7 oficinas es simplemente imposible. Requiere de un gran esfuerzo que no garantiza que llegue a satisfacer las necesidades del empleado.

La IA es capaz de cubrir estos retos ya que se basa en datos y preferencias de los empleados para estudiar e identificar sus necesidades, encontrar soluciones y facilitarlas a cada uno.

Esto no quiere decir que la función de desarrollo del talento se desvincule de su objetivo, sino que lo que hace es optimizar sus esfuerzos, reducir los costes e impulsar el uso de las herramientas formativas de las que, en ocasiones, no se aprovecha todo su potencial.

Su uso en los RR.HH.

Habitualmente los RR.HH. suelen quedarse en la cola en lo que respecta a la adopción de nuevas tecnologías. En ocasiones el motivo es un órgano de dirección que mira a este departamento como un gasto o bien por una falta de sensibilidad con la tecnología.

Esta perspectiva está cambiando ya que la tecnología de RR.HH. cada día es más accesible e interactuamos más y más con ella. En el último informe de Gartner sobre tecnología en los RR.HH. se indica que el 17% de las empresas ya está trabajando con IA en sus sistemas de gestión de RR.HH. y que el 30% planea implantarla en 2022.

Está claro que este tipo de tecnologías suponen un cambio muy importante que está revolucionando el mundo y es el momento de incluir a los RR.HH. en ello para lograr el impulso de la parte más humana de una organización: sus personas.